Friday, January 13, 2017

La Gran Muralla

La gran fortaleza china o la larga muralla de 10.000 Li es como también se le conoce a la antigua fortificación china construida para proteger las fronteras del Imperio de los ataques de los nómadas xiongnu de Mongolia y Manchuria.
Contando sus ramificaciones y construcciones secundarias, se calcula que puede tener unos 21.196 kilómetros de largo, desde la frontera con Corea, al borde del río Yalu, hasta el desierto de Gobi, en el borde sur de Mongolia Interior. Tristemente sólo se conserva un 30% de ella.
La Gran Muralla mide entre 6 a 7 metros de alto y 4 a 5 metros de ancho, en promedio; y fue designada como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 1987.  
Se dice que aproximadamente 10 millones de trabajadores murieron durante su construcción; y que contrario a la creencia popular no se enterraron en el muro, sino en sus inmediaciones.
El día 26 de enero de 2007 se dio a conocer que la muralla fue elegido como una de las ganadoras de la lista de las nuevas siete maravillas del mundo moderno.
Su historia se divide en cinco etapas:
                -Antes de la unificación de la dinastía Qin (221 a.C.)
                               China sigue siendo un sistema feudal y el territorio se divide en cientos de feudos o estados dirigidos por príncipes, en teoría todos reunidos bajo los Reyes de la Dinastía Zhou. Este periodo termina con el inicio de los llamados Reinos Combatientes.
                               Algunas de las partes construidas por el estado de Qi se mantienen aún en pie, y utilizaron comúnmente la técnica para más usual paredes en tierra colocadas por capas de unos pocos centímetros que se embalan una encima de otra. Las juntas de madera se extraían, dejando una pared de tierra. Este método podría desarrollar rápidamente sólidos muros que pueden resistir siglos.
                -A partir de la unificación de la dinastía Qin, cuando el emperador Qin Shi Huang inició la construcción de un muro en la frontera norte
                               Tras la unificación, la intención fue imponer un poder central y evitar el resurgimiento de los señores feudales, ordenó la destrucción de las murallas que dividían su imperio a lo largo de la antigua frontera. Después de los ataques de las tribus Xiongnu en el norte, envío un general para asegurarse que fueran derrotados y ordenó la construcción de un muro más allá del Río Amarillo para prtoeger mejores a los nuevos territorios conquistados. Este muro conectaría las diversas fortificaciones existentes a lo largo de la nueva frontera norte.
                                El transporte de una gran cantidad de materiales necesarios para la construcción fue difícil, por lo que los constructores utilizaron los recursos locales como las piedras en las construcciones de montaña y la tierra apisonada para la construcción en la llanura.
                -Periodo de la dinastía Han
                               A la muerte del emperador Qin Shi Huang, la dinastía Qin que fundó, sobrevivió sólo unos años. Liu Bang, un exsoldado de origen campesino se proclamó emperador con el nombre Han Gaozu. Éste abandona el mantenimiento de la Muralla de la era Qin, y cuando los Xiongnu, ahora unidos en una confederación estaban amenazando a través de la frontera.
                               A pesar de los esfuerzos por conseguir la paz, la Gran Muralla no fue abandonada, bajo el dominio del emperador Han Wudi, se recomienda el establecimiento de fronteras protegidas por pequeños muros para impedir las incursiones Xiongnu.
                               Wudi restauró y conectó porciones dela Muralla de la dinastía Qin y luego la extendió a través de lo que se convertiría en la Ruta de la Seda.
                -Periodo de baja actividad
                               Desde el periodo de los Tres Reinos hasta finales de la Dinastía Yuan, la muralla no experimentó grandes cambios y extensiones más allá de la reconstrucción de sectores desgastados. Destacan pequeños periodos de construcción en el siglo V al VII y los siglos XI al XIII.
                -Periodo de la dinastía Ming
                               La Gran Muralla como concepto se reavivó de nuevo durante la dinastía Ming, después de la derrota del ejército por parte de los Oirats en la Batalla de Tumu, en 1449. Los Ming no tuvieron una clara victoria y adoptaron una nueva estrategia para mantener las tribus nómadas alejadas de la capital mediante la construcción de muros a lo largo de la frontera norte de China.
                               A diferencia de las anteriores, la construcción de la dinastía Ming fue más fuerte y más elaborada debido al uso de ladrillos y piedra en lugar de tierra apisonada. Como consecuencia de las incursiones mongolas a través de los años, se dedicaron considerables recursos a reparar y reforzar las paredes. Las secciones Ming cerca de la capital Beijing son especialmente fuertes y resistentes.
                              Hacia el final de la dinastía Ming, la Gran Muralla defendía el imperio en contra de la invasión manchú que comenzó alrededor de 1600. El ejército Mingo bloqueó el avance manchú en el fuertemente fortificando el paso Shanhaiguan, impidiendo que entraran en el corazón chino. Los manchúes finamente fueron capaces de cruzar la Gran Muralla en 1644, cuando las puertas se abrieron en Shanhaiguan por Wu Sangui, un general que estaba en contra de las actividades de los gobernantes de la dinastía Shun que sucedió durante un breve periodo a la dinastía Ming. Los manchúes rápidamente ocuparon Beijing y derrotaron a la recién fundada dinastía.
                               Con los Qing como gobernantes, Mongolia se anexó al imperio, de modo que la construcción y reparación de la Gran Muralla se interrumpieron.


Los materiales usados en la construcción de la Gran Muralla eran los disponibles en los alrededores para su construcción; por eso, cerca de Beijing se usó piedra caliza, y en otros sitios se usó granitos o ladrillo cocido.
A lo largo de toda la muralla, se construyeron puertas, torres de vigilancia y fuertes directamente integrados a las paredes, sobre todo considerando que la Gran Muralla pasaba a través de las principales rutas comerciales.

Gran cantidad de partes al norte de Beijing y cerca de centros turísticos han sido conservados y reconstruidos; pero también hay cerca de 60 kilómetros en la provincia de Gansu que pueden desaparecer en los próximos 20 años, debido a la erosión de las tormentas de arena.




Friday, January 6, 2017

Torre de la Perla, Shanghai

Inagurada en 1995 con 468 metros de altura es uno de los edificios más altos de Asia, además de ser la quinta torre de televisión más alta del mundo; se encuentra ubicada en el distrito de Pudong, en la ciudad de Shanghai, en la Republico Popular China.

Su construcción demoró 4 años y tuvo un coste de $100 millones de dólares. Su diseño elaborado por el Arquitecto Jia Huan Cheng, está constituido por 5 esferas colocadas a diferentes alturas, la más alta tiene un diámetro de 45 metros, la segunda y más grande mide 50 metros de diámetro y se encuentran unidas entre sí por 3 columnas de 9 metros diámetro cada una y apoyadas por medio de vigas de hormigón a las esferas restantes.

La torre de la Perla Oriental es una torre de televisión, que cuenta en su base con el Museo de Historia de la ciudad, además con 3 niveles de miradores de 360°, el más alto recibe el nombre de “Módulo Espacial” y se encuentra a una altura de 350 metros. El segundo se encuentra a 263 metros se considera el mirador principal tiene dos plantas panorámicas, el piso de la planta inferior es de vidrio, lo cual hace estremecerse de miedo a más de uno; y el último mirador conocido como “Ciudad del Espacio” se encuentra a 90 metros.

En la segunda esfera se encuentra ubicado un restaurante giratorio, el cual representa una experiencia inolvidable a sus visitantes sobre todo cuando el cielo de Shanghai se encuentra despejado.

La Torre  de la Perla, como se le conoce, es el símbolo de la ciudad y se ha convertido en un atractivo turístico que recibe a más de 3 millones de visitantes, que llegan a disfrutar la espectacularidad del edificio tanto de día como de noche.